Ciudad de México.- A más
de 61 mil millones de pesos asciende el presunto desvío de recursos federales
perpetrado de 2011 a 2016 en Veracruz, por la administración de Javier Duarte.
Es un monto de malos manejos atribuible a un gobierno local del que no hay
precedente en México.
Para ponerlo en proporción,
para que el exgobernador de Veracruz hubiera podido ganar esa cantidad con su
sueldo de gobernador tendría que haber trabajado… 26 mil años por lo menos.
Con el monto de recursos
desviados en Veracruz se hubiera podido pagar el sueldo completo de todo el
Ejército Mexicano durante los próximos 47 años. Los 61 mil millones
representan, al menos, tres años y medio del presupuesto completo de la
Procuraduría General de la República (PGR).
Un Informe Especial de la
Auditoría Superior de la Federación (ASF) sobre los resultados de más de 220
auditorías realizadas del 2011 a 2016, a la administración de Duarte, arroja
que dicho gobierno incurrió en todo tipo de prácticas para desviar recursos,
desde la retención de subsidios que debían ser transferidos a municipios, hasta
el traslado de partidas completas a cuentas desconocidas, subejercicios, falta
de comprobación del supuesto gasto que sí se hizo, simulación de devoluciones
de dinero faltante, entre otros.
El desglose del desfalco es el
siguiente: en números redondos hay 21 millones de pesos que, en definitiva,
desaparecieron sin haber sido devueltos, y por los cuales la ASF ya presentó
decenas de denuncias penales ante la PGR, en contra de los funcionarios del
gobierno de Duarte que resulten responsables.
Además hay 36 mil millones de
pesos observados por la ASF a lo largo del sexenio de Duarte que tampoco
aparecen o han sido aclarados, pero donde se está a la espera de que haya una
explicación de parte de las dependencias involucradas. Funcionarios de la ASF
indicaron a Animal Político que existe la certeza de que ese dinero no
aparecerá, pero hay que esperar los plazos correspondientes para presentar las
denuncias.
Y además hay otros 4 mil 770
millones de pesos que el gobierno estatal de Duarte simuló que devolvía, pero
que luego retiró – otra vez – de las cuentas bancarias autorizadas, hechos por
los cuales la ASF ya presentó también las denuncias correspondientes.
El daño a las finanzas
públicas del país ocasionadas por la administración de Javier Duarte podría ser
peor. Gracias a intervenciones oportunas de los auditores se pudieron recuperar
aproximadamente 14 millones 755 mil pesos que ya habían sido transferidos a
otras cuentas, o no habían sido devueltos por el gobierno. De no ser por eso el
dinero desaparecido hoy estaría sobre los 75 mil millones de pesos.
En las auditorías practicadas
durante seis años al gobierno de Veracruz los auditores encontraron
irregularidades que se repitieron de forma sistemática. Por ejemplo, hubo 15
mil 600 millones de pesos que la administración de Duarte dice haber invertido
en varios rubros pero de lo cual no otorgó pruebas que hagan creíble que esto
fue cierto. Los auditores pidieron que se dieran documentos serios o se
devolviera el dinero, y no ocurrió ninguna de las dos cosas.
La ASF también detectó que la
Secretaría de Finanzas del estado sacó más de 13 mil 600 millones de pesos de
recursos federales de las cuentas autorizadas para transferirlo a otras cuentas
distintas, sin que dicho dinero fuera devuelto.
No es todo. Hubo cerca de 9
mil 600 millones de pesos de recursos federales que se entregaron al gobierno
estatal, para que fuera transferido a municipios y otros entes institucionales
por concepto de subsidios, sin embargo la Secretaría de Finanzas retuvo dicho
dinero, lo que también fue completamente ilegal.
Un ejemplo más. La Auditoría
también detectó que el gobierno de Javier Duarte no gastó –por lo menos no
legalmente – más de 8 mil 200 millones de pesos de partidas federales. Por ende
dichos recursos tendrían que haber sido devueltos a la Secretaría de Hacienda
federal, sin embargo, esto tampoco pasó.
El informe especial de la ASF
señala que producto de las 224 auditorías realizadas al uso de recursos
públicos federales en Veracruz entre 2011 y 2016 se detectaron, en total, mil
741 irregularidades de distinto tipo, que involucran malos manejos superiores a
los 70 mil millones de pesos.
El 2015, penúltimo año de la
administración de Javier Duarte, es el que concentra mayores irregularidades
descubiertas, con 571 en total, seguido de 2014 donde la ASF reportó 503
observaciones por presuntos malos manejos.
Un caso atípico.
El mal manejo de recursos
públicos federales es un común denominador en todos los estados del país. La
Auditoría Superior de la Federación acaba de revelar que las irregularidades en
el gasto de dinero federal en los estados, asciende a 183 mil millones de pesos
en los últimos cuatro años.
Sin embargo, de acuerdo con
funcionarios de la ASF el caso de Javier Duarte en Veracruz es atípico. Primero
por los elevados montos de recursos faltantes que desde el primer año de su
gobierno comenzaron a registrarse, pero sobretodo, porque la mayor parte de
dichos recursos nunca fue devuelto.
“El gobierno de Duarte nos
decía que ocupaba el dinero para gobernar, es decir, para cubrir otras
necesidades urgentes. Eso está mal pero es algo que sucede. Lo raro es que en
Veracruz, a diferencia de otros estados, la mayor parte del dinero nunca era
devuelto ni comprobado (…) es dinero que está desaparecido y que seguramente ya
no se encontrará”, dijo a Animal Político un funcionario de la ASF.
El Informe General de
Resultados de la Cuenta Pública 2016 presentado el pasado 20 de febrero por la
Auditoría al Congreso es prueba palpable de ello. De los 98 mil millones de
pesos que la ASF advierte que fueron mal manejados en todo el país, 19 mil 700 millones
corresponden al estado de Veracruz. Es decir, 1 de cada 5 pesos posiblemente
desviados por los estados en 2016 corresponde al gobierno de Javier Duarte.
Solo para ponerlo en
proporción: e segundo estado con el mayor monto observado por la auditoría es
Nuevo León con nueve mil 800 millones, casi diez mil millones menos que
Veracruz.
Las denuncias: entre impunidad
y corrupción
La Auditoría Superior de la
Federación ha presentado hasta ahora 65 denuncias penales ante la Procuraduría
General de la República (PGR) por un posible desvío de recursos que supera los
21 mil millones de pesos. Dichas denuncias y monto continuarán incrementándose
en los próximos meses conforme se agoten los tiempos de justificación de todo
el dinero que falta.
Pero hasta ahora ni una sola
de las averiguaciones y carpetas de investigación que se han iniciado han sido
consignadas ante un juez, y mucho menos hay exfuncionarios castigados por ello.
Toda la desaparición de recursos federales en la administración de Javier
Duarte permanece impune hasta la fecha.
De acuerdo con autoridades
involucradas en estas investigaciones, el motivo principal por el cual no se
han consignado los expedientes es por la “carga de trabajo” que enfrenta la
Subprocuraduría de Delitos Federales de PGR, responsable de atender e integrar
las denuncias que presenta la Auditoría.
Pero también se han presentado
ya casos de posible corrupción que han frenado el avance. Un ejemplo de ello
fue la determinación de un fiscal de enviar al archivo 12 averiguaciones que la
ASF había promovido, por la simulación en la devolución de recursos en la
administración de Duarte, esto con el argumento de que eran indagatorias que le
correspondían a la Procuraduría de Veracruz y no a PGR. Además no se notificó
de dicha situación a los auditores, pese a que ellos son coadyuvantes en todo
el caso.
Cuando la ASF se percató de lo
ocurrido, tuvo que recurrir a demandas de amparo para que los casos fueran
devueltos a la PGR. Dichas demandas continúan en proceso y el fiscal
responsable fue separado de su cargo.
Los auditores estimaban que a
finales de 2017 se consignarían los primeros casos relacionados con la
administración de Duarte, pero ello no ha ocurrido hasta la fecha.
Animal Político