Concluía el primer día de
gira por Chiapas de Andrés Manuel López Obrador en Chilón en alta montaña.
Minutos después de las ocho
de la noche en el ejido “Las Canchas”, un grupo de pobladores detuvo la
caravana de autos del precandidato López Obrador, del senador Zoé Robledo,
Rutilio Escandón, aspirante de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) a la
gubernatura del estado, entre otros y de los medios de comunicación.
Y fue ahí metros adelante
donde una vulcanizadora denominada “López” pudo reparar el daño hecho por tres
clavos.
“Lo qué hay que hacer es
atender sus demandas, que haya trabajos, que tengan ingresos porque hay mucho
abandono, mucha pobreza. Si no venimos nosotros, no viene nadie. Yo estoy hecho
a estas dificultades, a todo camino, ya me ha pasado. Es una llanta ponchada, a
todo el mundo se le poncha una llanta”, dijo López Obrador.