Ciudad De México .- Frente a la imitación de muñecas mazahua-otomíes de origen chino que se han puesto a la venta en tiendas departamentales de Liverpool en el país, se presentó un punto de acuerdo en el Senado para frenar esa comercialización, pues se atenta contra la identidad y economía de los pueblos indígenas.
De acuerdo con la senadora
panista Sonia Rocha Acosta, el punto de acuerdo exhorta al titular del
Ejecutivo federal para que, a través de la Secretaría de Economía, se
investigue la importación y comercialización de esa artesanía con carácter de
“urgente resolución”.
Se trata de la imitación de
las típicas muñecas de trapo con trenzas y vestimenta de colores (tela de
popelina) que usualmente son realizadas por mujeres otomíes de Querétaro, y que
se expenden en tianguis, mercados o de forma directa en diferentes puntos del
país. A los artesanos que las hacen, y dependiendo del tamaño, les toma de dos
y hasta cinco días confeccionarlas.
“Estas muñecas otomíes no
sólo representan un juguete para las niñas de las comunidades indígenas, sino
son una artesanía que refleja tradición, raíces, cultura e idiosincrasia, misma
que es exhibida en un museo de la capital Queretana, y además cuenta con un
festival anual en el municipio de la cual es oriunda, Amealco de Bonfil”,
explicó la legisladora.
La petición de Rocha Acosta
es que se retiren del mercado las imitaciones chinas, sin menoscabo de la
modernización y el derecho a la libre competencia y progreso económico,
conceptos que encuentran fundamento en la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos, en su numeral segundo, donde se establece:
“La nación mexicana tiene
una composición pluricultural sustentada originalmente en sus pueblos
indígenas, y que éstas consagran sus propias instituciones sociales y
culturales, además de que la conciencia de la identidad indígena debe ser
criterio fundamental para determinar las disposiciones sobre los pueblos
indígenas.”
La senadora también aclaró
que el punto de acuerdo no atenta contra el comercio de las cadenas
departamentales (como Liverpool), sino que éstas igual deben apoyar la
comercialización de lo hecho por artesanos mexicanos y así se contribuya a la
economía nacional.