Petróleos Mexicanos (Pemex)
negó que haya suministrado combustibles de mala calidad tras el cierre temporal
de refinerías en México y Estados Unidos, ya que en todo momento han cumplido
con la normatividad.
En un comunicado indicó que
luego de los fenómenos naturales que derivaron en el cierre de refinerías en
Estados Unidos y México, principalmente en Houston y Salina Cruz, implementó
diversas medidas emergentes a fin de garantizar el abasto de gasolinas en todo
el país.
Por lo que, con la
autorización de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), la empresa productiva
del Estado importó cargamentos adicionales de combustibles con especificaciones
diferentes.
De acuerdo con Pemex fueron
"mezcladas con gasolinas de producción nacional a fin de modificar su composición,
para que se pudiera cubrir plenamente con las características requeridas por la
norma ambiental mexicana. Una práctica común a nivel internacional".
Asimismo, reiteró que las
gasolinas y el diesel que se vendieron en el mercado nacional cumplieron en
todo momento con la normatividad.
"Pemex reaccionó de
manera inmediata y ágil para encontrar alternativas que evitaron mayores
adversidades para el consumidor nacional. Lo anterior no fue un logro menor,
porque incluso en Estados Unidos se presentó desabasto de combustibles, lo que
no sufrió México", apuntó.