Por error, las fuerzas egipcias matan a turistas mexicanos
Las víctimas se encontraban en una zona no autorizada a los turistas, según informó el ministerio del Interior egipcio; las autoridades mexicanas no se han pronunciado oficialmente sobre el hecho
Lass fuerzas de seguridad egipcias mataron a 12 mexicanos y egipcios e hirieron a otros 10 cuando le dispararon por accidente a un convoy turístico mexicano mientras se enfrentaban a jihadistas en el desierto del oeste del país, según informó el ministerio del Interior.
El desierto del oeste egipcio, muy apreciado por los turistas, es uno de los bastiones de grupos jihadistas, entre ellos, una filial del grupo Estado Islámico que decapitó en agosto a un joven croata que trabajaba para una compañía francesa, y perpetra a menudo numerosos atentados contra las fuerzas de seguridad en todo el país.
"Las fuerzas conjuntas de la policía y del ejército, que perseguían a terroristas en Wahat, en el desierto occidental, abrieron fuego por error contra cuatro vehículos que transportaban turistas mexicanos", indicó el ministerio del Interior en un comunicado.
"Doce personas murieron y 10 resultaron heridas, entre los turistas mexicanos y egipcios" que les acompañaban, precisó la misma fuente. Las víctimas "se encontraban en una zona no autorizada a los turistas", añadió.
El ministerio no precisa el número de turistas mexicanos muertos, ni si los vehículos fueron alcanzados por disparos de armas automáticas, de artillería o por bombardeos aéreos.
Las autoridades mexicanas no se han pronunciado oficialmente por el momento.
Durante la tarde, el grupo Estado Islámico en Egipto había afirmado en un comunicado que "había resistido una operación del ejército en el desierto occidental" y "obligado a huir a miembros del ejército", sin dar más detalles.
Tanto las filiales egipcias del EI, el Estado Islámico en Egipto y Provincia del Sinaí, como el resto de grupos jihadistas reivindican a menudo ataques contra las fuerzas del orden, especialmente en la península desértica del Sinaí (este), donde tienen su principal feudo.
Estos ataques aumentaron, incluso en el centro de El Cairo, desde que el ejército derrocó y detuvo al presidente islamista Mohamed Mursi a principios de julio de 2013.
El artífice del derrocamiento de Mursi y su sucesor al frente del país, el presidente Abdel Fatah al Sisi, lanzó además una sangrienta represión contra los partidarios del jefe de Estado islamista. Centenares de policías y soldados han muerto en estos atentados desde hace más de dos años. Los jihadistas aseguraban en un primer momento actuar en represalia a la implacable represión contra los partidarios de Mursi.
Desde julio de 2013, las fuerzas de seguridad han matado a más de 1.400 manifestantes pro Mursi, entre ellos miembros de su cofradía de los Hermanos Musulmanes, y ha detenido a otros 15.000. Cientos de los detenidos, entre ellos el propio Mursi, han sido condenados a muerte en expeditivos procesos de masa, que Naciones Unidas calificó como juicios "sin precedentes en la Historia reciente" del mundo.
FUENTE: www.lanacion.com